martes, 12 de agosto de 2008

EN VIVO Y EN DIRECTO

Esta noche después de mucho, volveré a vivir esa adrenalina que desde siempre despierta en mi el escuchar una banda tocar en Vivo.

Es que oír tus canciones preferidas en concierto es todo un clímax musical.
Aunque hoy no será precisamente un espectáculo alocado, vuelven a mí esos recuerdos grabados en mi cabeza de estos eventos que nunca olvidare.

Al primer concierto que asistí hace ya algunos años, fue al de un grupito mexicano muy de moda por esos días que se hacían llamar Muñecos de Papel, debo admitir que el show no merecía ser mi debut en estas jornadas memorables.
El Colegio Carmelitas sirvió de escenario aquella vez, y aunque escuche todas las tonadas que esperaba, lo que mas me deslumbro fue la cantidad de niñas lindas que me rodeaban y abrazaban sin conocerme, alocadas por la euforia de la música.
Esa vez por mas que trate de convencer a medio mundo que me acompañe, tuve que resignado a mis 17 años asistir solo.

Luego las cosas fueron mejorando y, acompañado de la chica de mis sueños por ese entonces, fui “voluntariamente” a ver cantar a Luis Miguel, Gloria Trevi; Fey, y demás divos mexicanos que se animaban pisar estas olvidadas tierras musicales.

Claro que también supe ir a inolvidables recitales con una carga extra de energía, fue así como grite y salte sin parar todas las veces que vi. a Pedro Suárez Vertiz, me llene de ritmo con los temas de Miki Gonzáles, me sentí mas rockero que nunca con Mar de Copas, también baile un poco con Niche y Jerry Rivera, pero indudablemente sentí la esencia de la música escuchando en vivo a los Enanitos Verdes, simplemente los máximo.

Quizás para muchos no signifique nada, pero personalmente en los espectáculos musicales en vivo se mezcla la música, la adrenalina, la euforia y la locura que merecen tener este tipo de eventos.

No puedo dejar de mencionar las guerreras jornadas Metaleros en el Campo de Marte, en el Olivar de San Isidro o en la Concha Acústica de San Miguel que viví con mi hermano Armando, ahí aprendí a “poguear”… ahí me sentí un rebelde sin causa…ahí supe expulsar toda mi energía juvenil contenida.
Descubrí por esos días toda la gran movida Metal que existe en Lima y que muy pocos conocen.


A medida que pasaban los años evolucionaba en mis gustos en la música, es por eso que me emociono hasta el limite al recordar tres de los mejores conciertos a los que asistí en mi vida,

Una noche de agosto de esos lejanos 90, estaba pactada la cita, se presentaban en un Colegio de la Molina el dúo Sueco Roxette era la primera y quizás la única vez que tocarían en Lima Perú.
A las 8pm buscaría en su casa a “L” para enrumbar directo y sin escalas a escuchar tocar a nuestros ídolos.

Eran las 6pm y recibí una llamada inesperada.

Era Marilyn, una antigua amiga.
Nos conocimos algunos años atrás
Ella estudiaba Turismo y Hoteleria.
Había una empatia evidente entre nosotros , pero que nunca paso de coqueteos muy subidos de tono.
Deje de verla por un buen tiempo y justo se le ocurría buscarme aquel 25 de agosto.
Eran casi las 7pm y me encontré con la chica Turismo, caminamos por un parque medio oscuro cerca de mi casa, no tengo por que negar que nuestra charla se hacia cada vez mas entretenida y coquetona, tanto así que ella me animo a prolongar la tertulia acompañándola con todas las copas de Pisco Sour que nuestros cuerpos aguanten.
La propuesta era por demás tentadora, en ese momento me sentí sin fuerzas para decir que NO, me repetía a cada momento que ..”pensándolo bien a mi Roxette no me gusta mucho”..”iré. a ese concierto solo por dale gusto a “L” “…”no puedo perder esta oportunidad de pasarla súper con Marilyn”…

Después de meditarlo profundamente, tome una decisión sin que me temblara la mano.


Cuando toque el timbre de su casa, “L” abrió la puerta en tan solo 5 segundos, y cuando la vi mas linda que nunca vestida de negro, me di cuenta que elegí la opción correcta.
Hubieron muchísimas anécdotas en ese concierto, como por ejemplo que nos colamos sin querer a la zona Platinum, cuando solo teníamos entradas para tribuna…y que las cámaras de TV nos captaron en plena locura descontrolada al borde del escenario… y que “L” se quedaba paralizada por momentos incrédula viendo el espectáculo que siempre soñó ver…y que termine siendo un fan enamorado de Marie Fredriksson … pero esencialmente que fue una de las mejores noches que pase al lado de “L”.


Tampoco olvidare aquella vez, que con mi hermano Julio nos fuimos sin temor alguno al estadio Miguel Grau del Callao, para poder ver en vivo a MIGUEL RIOS , sin duda el mejor rockero de habla hispana, unas pilas cargadísimas, una canción mejor que la otra, un maestro en el escenario.
Me dio gusto quedarme ronco aquella vez, pero lo que mas me agrado fue saber que mi hermano es la mejor compañía en cualquier ocasión.

No temo confesar que soy un asiduo seguidor de los españoles de la OREJA DE VAN GOGH , es por eso que estuve en primera fila en el concierto que dieron hace un par de años, al que asistí con una amiga.
Fueron casi dos horas de música en VIVO que quedaron grabadas en mi mente y en mi piel, al extremo de olvidarme por completo de mi ocasional acompañante.

El año pasado en el concierto de VOCES SOLIDARIAS a favor de los damnificados del terremoto de Ica, estuve presente única y exclusivamente por ver a AMAIA MONTERO , y esa noche se dio la combinación perfecta , un espectáculo celestial con una excelente compañía.
En el escenario y a mi lado tenia dos estrellas brillantes hechas mujer.

Una de esas estrellas también estuvo conmigo en el concierto de BRYAN ADAMS , la música y sentir la alegría de ella, hicieron de ese domingo una velada perfecta.

Y hoy mientras coreo las canciones mas conocidas de ABBA en este concierto tributo hecho por un grupo argentino, y al ver otra vez la tierna sonrisa de la mejor compañía del mundo a mi lado , canto con mas fuerza esta estrofa…

” Quiero dar las gracias a las canciones que transmiten emociones,quiero dar las gracias por lo que me hacen sentir, debo admitir que con la música vale vivir..por eso quiero dar las gracias”